Crónica

Una se pasa toda la tarde (bueno, vale una buena parte de la tarde, aunque no toda) cocinando delikatessen, para que luego, en un plis-plas, los muy buitres se lo coman todo. En un periquete, ostras!!! Pero bien, ¿eh? muy bien!

Cayó un pantalón que a las dos novias de mis hijos (me resisto a llamarlas nueras, aunque lo son, aixx) les gustó. Sin embargo al capi, que fue quien lo pagó le pareció que era un pantalón "de tía María" (clásico, para entendernos). Pues lo será, pero me queda de biennnnnnnnn...

Para compensar el estilo clasicorro que no me caracteriza, me metí en un Outlet llamado Mandarina, pensando "ahora me compraré un bolso y me va a importar muy poco que sea de la temporada pasada".

Empujo la puerta y lo primero que veo son unas botas camperas rodeadas de tejanos.

- ¿Y los bolsos?- pregunto

- No, todo el mundo se equivoca. Esto no es Mandarina Duck (ah conio) es Mandarina a secas (Clementina, podrían haberle puesto, para no confundir al personal).

Me doy una vueltecilla y enseguida veo una chaqueta que llama mi atención. (Peligro).

Miro el precio 45 €. Ahivadios, qué barata! esto tiene truco!

- Explícame el precio de esa chaqueta

La chica me mira como si yo fuera tonta (para estas cosas reconozco que lo soy, y para algunas otras cosas también, pero no del todo)

- Pues no lo sé, porque esta es de este año (consulta en una libretita verde). Ah! Ya lo sé: es que esta chaqueta fue llevada en un desfile de presentación por una modelo (ohhhhhhhh, y me cabe- pienso yo, ahora aún me gusta más)Me la vuelvo a probar. (Y la llevó una modelo, aix, y me va que ni pintada, más aixxxxxx)

- ¡Mia!- 45 euros de chaqueta de una piel más falsa que un duro sevillano pero que ha hecho las delicias de mis dos nueras (bueno, vale, vamos a considerar que son nueras y vamos a decirlo. Arare, que ya tienes un añito más y has crecido un poco más - hacia adelante-)

Total: contentita como una niña con zapatitos viejos (que son los verdaderamente cómodos) salí del Outlet Mandarina (que no Mandarina Duck) compuesta y sin bolso. (Ya caerá)

Por la noche aparecen los tres chicos que tienen novia (la tercera novia es tan reciente que aun no la puedo considerar nuera) y ni os imagináis la que se lía (mi casa es muy divertida, el día que críen todos aquello parecerá un colegio, lo estoy deseando, sinembargo, buf buf, debo ser como una gallina clueca) llueven los regalos: una mantelería (hacía falta, vive dios), un top para ir al gimnasio digno de María Sharapova (que me queda moníssssimo, oigan), un jarrón estilizado que decora muchísimo (de diseño, eh? no se crean que es del todo a cien) , los libros que me autoregalé, los dineros contantes y sonantes de mi mamá (a falta de la frase de mi papá, ya se encargó ella de decirla), y algo que me emocionó más de la cuenta.

J.G. se presentó al mediodía con un regalo para mi, su ex-¿suegra? (cielos). Bueno, la madre de su ex novio, para entendernos. Si me lees, reina mora, ya ves que digo en público que me emocionaste.

Eo! Y me faltan dos hijos, que aun no han venido.

Y ... bueno, las partes ponno de la noche no las voy a explicar, faltaría más!

Total, que el Ebro guarda silencio al pasar por el Pilaaaaaaaaaaaaaaaar i por Madrid desfilan las tropas y la cabra, la cabra, la piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiip de la cabra, lamadrequela... bueno, eso!

Pero el acontecimiento más importante del 11-12 de Octubre no es ni el día del Pilar, ni la Hispanidad ni el desfile ni ná ni ná, sino que nací yo. Ea.

Ei!!, veritat que no cal que us tradueixi? és que em fa una mandraaaaaaaaaa... a més, tinc la cuina com un camp de batalla i vaig a recollir (a buenas horas, però això és el que hi ha)

Lo siento, Blogger no me deja subir ni una imagen :(